lunes, 12 de diciembre de 2016

El poder adquisitivo en Venezuela versus precios de los alimentos

El presente articulo fue publicado por el autor en el año 2016 en el Diario panameño El Financiero
Nro. 143/2016. Disponible: www.efpanama.com/el-poder-adquisitivo-en-venezuela-versus-precios-de-los-alimentos/

En los momentos actuales que vive Venezuela la inflación ronda alrededor del 800%, tasa que no solo es la más alta del mundo sino que, a diario alcanza niveles impredecibles para el consumo del venezolano.
En los últimos doce meses el país registra la mayor caída en términos de ingreso real, de capacidad de compra en Venezuela de 42%, caída que genera que la población tenga problemas para enfrentar la vida cotidiana.
Las importaciones han descendido por debajo de un 30% con relación a los dos últimos años, debido entre otras razones a que el estado intenta sustituir a la empresa privada como productor de bienes y servicios, esto ha provocado un desabastecimiento del 70% en los alimentos algo tan necesario e imprescindibles para la subsistencia humana, carestía que podemos evaluar de crítica al irse del alcance adquisitivo de la población en general.
En términos de políticas de precios y de poder adquisitivo de las personas, veamos algunos ejemplos de productos y su incidencia en el bolsillo del venezolano, partiendo del hecho que el salario mínimo del venezolano es de 22. 576 bolívares.
En los momentos actuales la confección de la repostería casera está demandando altos precios en su materia prima, entre los ingredientes más caros y difícil de conseguir se encuentran: la harina de trigo, el azúcar y la mantequilla, a criterios de algunas pasteleras una torta para matrimonio puede llegar a costar hasta 160.000 bolívares y más, la de una quinceañera puede estar por los 75. 000 bolívares y una torta sencilla de un kilogramo puede rondar entre 12.000 y 20.000 bolívares, de acuerdo con las encuestadas este último trimestre del 2016, los costos de los ingredientes para una torta de kilo se han incrementado hasta 1000%.
En tiempos atrás en nuestra Venezuela había un refrán que decía: comer arroz con huevos es cosa pobres, en la actualidad se ha convertido en cosas del que lo pueda comprar, pues no todo los venezolanos tienen acceso a los huevos dado sus altos precios. Por solo poner un ejemplo en el estado Táchira se conoció que un cartón de huevo está costando en estos momentos 4.068 bolívares y más, por lo que se necesita más de cinco días de trabajo para comprar un solo cartón de huevo, en base a un salario mínimo.
El aceite, un recurso tan necesario en la cocina venezolana ha vuelto a los anaqueles de las tiendas y negocios, siendo la marca Vatel la más abundante, dicha reaparición lejos de ser alegría, significa un hueco en el bolsillo de los venezolanos pues está costando 1.600 bolívares lo que representa tres días de sueldo.
Otros alimentos a tomar en cuenta son el cereal Cherios y la avena Quaker, pues sus nuevos precios son alarmantes: el cereal en los momentos actuales está costando 8.081 bolívares y la avena 7.910 bolívares, lo que representa 21 días de trabajo de un venezolano que gane salario mínimo, solo teniendo salarios medios o altos se puede disfrutar de estos dos alimentos.
Otro recurso indispensable lo constituye el azúcar, por solo poner el caso de la azúcar morena de marca La Negra la cual se produce en el estado Lara y tiene un costo de 2.650 bolívares el kilogramo y cuando se consigue, en ocasiones se encuentra la importada pero en 2.900 bolívares o la bachaqueada que te venden medio kilo en 2.500 bolívares, es decir que por donde la compres costará una fortuna. Endulzar los alimentos sin duda se ha vuelto un acto de amargura para los venezolanos, pues aparte que no se consigue el azúcar, si llegas a encontrar cuesta prácticamente 4 días de trabajo y hasta más.
En los mercados de El Tigre, estado Anzoátegui reaparecen también este mes productos tales como: la leche Prebio 1+ de 900 gramos en 7.500 bolívares, cuando en meses atrás solo costaba  entre 900 y 1.700 bolívares, la fórmula láctea Nan la que se produce a base de soya, en su presentación de 400 gramos, pasó de costar 500 a 5.200 bolívares y por ultimo tenemos el caso de las compotas de 175 gramos que costaban en meses atrás 110 bolívares hoy están 973 bolívares, por lo que un padre de familia que gana salario mínimo y que solo tenga un hijo, debe trabajar dos días para comprar una sola compota a su hijo.
Esta es la realidad del poder adquisitivo del venezolano contra la política de precios establecida por el gobierno y tal vez algunos tengan acceso a estos productos la mayoría con precios regulados, pero solo cuando hacen una cola de seis horas o más o cuando se van a un mercado informal, que se han de llamar bachaqueros.

Bibliografía