domingo, 3 de octubre de 2021

LA PANDEMIA CORONAVIRUS ACENTÙA LA CRISIS ALIMENTARIA EN EL MUNDO

La llegada del coronavirus ha agravado la problemática del hambre en el mundo, las restricciones impuestas para hacerle frente a la pandemia ha llevado al extremo las necesidades de los más pobres. La crisis alimentaria actual amenaza con incrementarse este año, de 47 a 54 millones el número de niños que pasan hambre en el mundo. El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) reporta que más de 300 niños mueren cada día por falta de alimentos y que los índices de desnutrición amenazan a siete de millones de menores de cinco años.
En algunos países de África Subsahariana el trabajo agrícola se paralizó por completo lo que evidencia que no habrá cosechas y mucho menos alimentos disponibles para el consumo. En Burkina Faso, país del Occidente Africano, se espera que el número de niños desnutridos se incremente este año hasta cinco veces, hay niños que en poco tiempo han perdido la mitad de su peso, sus madres también sufren malnutrición.
Situación muy parecida tienen países como Irak, Siria, Sudan del Sur, Somalia, Afganistán y Yemen donde la tragedia de la guerra se sumó a la pandemia. Recientemente en Yemen, se conoció del caso de un niño con seis libras de peso con tan solo siete meses (lo que debe pesar un recién nacido).
América Latina no está exenta de esta problemática global, la hambruna y la pobreza son dos males que se han apoderado del continente de manera drástica y en grandes proporciones con la llegada del coronavirus, según el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la Organización de Naciones Unidas (ONU) la emergencia sanitaria elevaría de tres a catorce millones la cifra de personas en la región que tendrán problemas para acceder a los alimentos, el confinamiento obligatorio dejó a millones sin empleo dificultando el acceso a la a los alimentos.
David Besaley director del PMA señaló que si no nos preparamos y actuamos ahora para asegurar el acceso a los alimentos podríamos enfrentar múltiples hambrunas en unos pocos meses, se reportan unas 330 muertes diarias por hambre, son 10 mil niños cada mes y otros siete millones menores de cinco años se enfrentan a la desnutrición por efectos de la para económica por la pandemia.
La hambruna comienza a golpear la región como lo revelan los datos del PMA, en el 2019 tres millones de personas en América Latina padecieron hambre, pero este año con las restricciones impuestas se esperan que incrementen a 14 millones.

Fuente: Programa Mundial de Alimentos-Organización de Naciones Unidas. 2020


En Brasil, el segundo país más golpeado por el coronavirus los habitantes de las favelas se organizaron para llevar alimentos a las casas durante el confinamiento, aun así no llegaban a todas las familias y por eso era usual ver a muchas personas en las calles violando la cuarentena, en otros casos como en Chile los barrios organizaron ollas comunes para asegurarse que adultos y niños se alimenten por lo menos una vez al día.
Para evitar que el coronavirus y el hambre se enquisten en América Latina se necesitan acciones emergentes porque de lo contrario ambos fenómenos desestabilizarían políticamente la región, se desatarían migraciones masivas, se agudizaría el deterioro económico y muchas personas morirán de hambre además de hacerlo por el coronavirus.
Las víctimas de la hambruna son gran parte de la fuerza laboralmente activa de América Latina, son trabajadores informales, comerciantes y nuevos pobres que han quedado sin trabajo, debido a la pandemia
Bibliografía:
1. Gonzales, M (2020). Crisis del hambre se agudiza en Latinoamérica debido a la pandemia. Consultado el de julio. Disponible en: www.ecuavisa.com/noticieros-anteriores
2. Jiménez, P (2020) Hambre en tiempos de pandemia matará a 128 mil, según la ONU. Consultado el de julio. Disponible en: www.ecuavisa.com/noticieros-anteriores